Después de dedicar horas y horas leyendo noticias, mirando gráficos de velas, revisando informes anuales de compañías y poniendo órdenes de compra-venta, llega a final de año y tu cartera no ha rendido todo lo que tenías proyectado. ¿Te suena? Seguramente si. Y es que las estadísticas muestran que la mayoría de los inversores particulares, e incluso una gran parte de los profesionales, no logran superar al mercado en el medio-largo plazo.
Justo por eso, cada día más gente se decide por la inversión pasiva a través de Robo Advisors. Si aún no lo has hecho y estás pensando en hacerlo, esta comparativa te interesa. Pondremos los gestores automatizados más conocidos e interesantes cara a cara, para que puedas tomar una decisión lo más informada posible.
Pero primero de todo, vamos a ver que es un Robo Advisor y cuales son esas características que los hacen tan interesantes para la mayoría de nosotros.
En pocas palabras, un Robo Advisor es un gestor de carteras automatizado que adapta las inversiones al perfil y las circunstancias personales del cliente. Es habitual que al hacer la inscripción a uno de estos servicios tengas que rellenar una encuesta que sirve para conocer tu situación financiera y tolerancia al riesgo, entre otras cosas. En base a ésta, un algoritmo determina qué tipo de cartera se adapta mejor a ti.
Y ya está. Ya no tienes que hacer nada más a parte de transferir el dinero a la cuenta de inversión. Es así de fácil. Automáticamente se irán invirtiendo los fondos disponibles en tu cartera, y, aplicando rebalanceos de cartera de manera constante.
Detrás de este nombre, que en español suena tan feo, se esconde una de las revoluciones más interesantes en el mundo de las finanzas de los últimos años. Si no te lo crees, presta atención:
Todo pinta muy bonito, pero... ¿hay un lado no tan bonito de los Robo Advisors? Pues, en parte, si. El principal inconveniente con el que te vas a topar es que los resultados van a tardar en llegar. Como las carteras se basan en replicar índices, no lo vas a hacer mejor que esos índices. Aunque esto no tiene por qué ser malo. Es más, si tu objetivo es la inversión a largo plazo posiblemente sea una de las mejores opciones para invertir parte o la totalidad de tu cartera.
Por todas las ventajas que hemos enumerado, la demanda por este tipo de servicios ha aumentado considerablemente. Y el número de robo advisors en España ha ido creciendo durante los últimos años. A día de hoy, los cuatro Robo Advisors independientes de mayor importancia son: Indexa Capital, Finizens, Inbestme, y, Finanbest. Aunque cada vez hay más bancos que se aventuran en este nuevo mercado y ofertan servicios similares. Ejemplos de esto son los gestores automáticos ofrecidos por OpenBank (grupo Santander), Bankinter, o, ING, entre otros.
Vamos con una tabla resumen para ver de forma clara qué similitudes y diferencias tienen los principales Robo Advisors:
Si nos fijamos en los activos incluidos en las carteras, podemos ver claramente dos filosofías: inversión exclusivamente en renta variable y fija, o, la inclusión además de materias primas (principalmente oro). Esto no es, necesariamente, ni bueno ni malo. La otra diferencia importante es la inversión mínima requerida, que aunque en todos los casos se trata de cantidades relativamente asequibles, sí que podría llegar a condicionar nuestra elección. Aquí, nuestra recomendación es que si estás realmente interesado en contratar un Robo Advisor en concreto, y aún no dispones de la cantidad mínima, sigas ahorrando hasta conseguirlo.
Por lo general, los esquemas de comisiones cobradas por los gestores automáticos suelen ser muy simples. Éstas suelen depender del tipo de cartera ofrecida y del tamaño de la cartera. Principalmente los Robo Advisors cobran comisiones en concepto de gestión de la propia cartera (el único importe que depende enteramente de ello), por la custodia de la cuenta (que es cobrada por la entidad donde se custodia la cartera), y, la comisión de gestión cobrada por los propios fondos a través de los cuales se invierte.
Además de estas comisiones, algún robo advisor puede llegar a cobrar una pequeña comisión por ingreso o retirada de dinero bajo ciertas condiciones. Pero suelen ser cantidades casi despreciables frente al resto de comisiones tanto por su cuantía como por la frecuencia en la que incurrirás en ellas.
Para ver cómo comparan los diferentes gestores en cuanto a comisiones, haremos el análisis de cuánto pagaríamos de comisiones durante el primer año bajo los siguientes tres escenarios.
Cabe también indicar que Finizens aplica una bajada de las comisiones de gestión de la cartera de un -0.02% por cada año que estemos con ellos hasta un mínimo de un 0.15%. Esta forma de premiar la fidelidad parece doblemente beneficiosa. Por un lado, la bajada de las comisiones mejorará nuestra rentabilidad. Y por otro, nos incentiva a perseverar en nuestro objetivo de invertir a largo plazo.
Respuesta corta: SI! Los robo advisors son muy transparentes en su gestión, y puedes encontrar toda la información necesaria en sus mismas páginas web. Por lo que nada te impide copiar, o al menos imitar las carteras modelo que ofrecen. Eso sí, tal vez desde tu broker no tengas acceso exactamente a los mismos fondos, pues algunos de ellos solo están disponibles para inversores institucionales (gestores que mueven grandes cantidades de dinero). Pero seguro que puedes encontrar un fondo o ETF equivalente.
Debes tener en cuenta que estos gestores automáticos, tienen acceso a comisiones muy reducidas. Por lo que, aunque inviertas en los mismos fondos/ETFs, puede que acabes pagando comisiones de gestión de los fondos entre 2 y 6 veces mayores, de media. Y eso sin contar las comisiones propias de tu broker. Además, tendrás que ser tú mismo quien realice las compras/ventas y rebalanceos de forma periódica. Esto no solo implica la dedicación de horas. Sino que también resulta mucho más difícil desconectarse de las emociones o corazonadas (muchas veces nuestro peor enemigo como inversores).